sábado, 29 de diciembre de 2012

Llenándote de versos


Y yo que nunca quise un poeta entre mis piernas. 


Sólo alguien que entienda que tengo la cabeza llena de humo y poesía.
De versos que no escribo.
Una forma de sentarme a mirar la vida pasar sin que apenas se me note
qué fácil es de romper por dentro.
Cuánto gemido ahogado.

Nunca quise un poeta.
O sí.
Un poeta que me entienda cuando ni yo sé lo que digo.
Que me eche el humo en la cara en cada calada, desnuda.
Por dentro y por fuera.
Sonriendo, sudando.
Sabiendo que soy suya y de nadie.
Con rejas de lana que sepa descoser de vez en cuando, 
que no me lleguen a dejar besar otras bocas.
Un poeta que puede que no escriba poemas, ni le haga falta,
pero con la mente llena de versos que gritarme si alguna vez se me ocurriera irme.
Que sepa sonreírme con ganas.
Escucharme con ganas.
Contarme con ganas.
Follarme con ganas.
Quizás quererme con ganas.
Disfrutar y vivir.
Y que no me mire con cara de idiota si le susurro en un descuido que...
¿Por qué no?
que me entierren en el hueco que hay en su clavícula.

viernes, 28 de diciembre de 2012

Para hacerme feliz hay que estar muy loco. Muy loco por mi.


Hoy le necesito. Abrazándome. Respirando el olor de su ropa. Escuchando su voz bajito, diciendo que no pasa nada.. que él va a estar ahí SIEMPRE. Rozando cada poro de su piel. De esa que relaja pulsaciones. Y me calma. Se me olvidaban los problemas. Y hasta parecía fácil escalar montañas de vida con él. Sabía exactamente donde tocarme, donde besarme, donde mirar.. que me hiciera sentir mejor.  Me gustaba sentarme en sus rodillas y llorar sin querer. Hablarle de la vida, sin que a veces escuchara una sola palabra mientras me besaba. Solíamos pensar que nuestro amor no acabaría nunca. Sólo será un paréntesis, una vida nueva que se acaba cuando vuelve a empezar la nuestra. Y él me hablaba de amor.. ay, amor. Cuánto tiempo. Qué raro se está haciendo este paréntesis. Y qué largo. Y cuánto queda.. Amor
Hoy, le necesito. Mañana quizá no. Mañana puede que me pierda entre las sábanas de algún amor de invierno. Puede que sienta celos del aire y quiera salir a buscar refugio. Mañana puede ser el mejor día de mi vida, y quizá no me acuerde de él. 
Cuando encuentre la calma, cuando recupere la cordura..quizá si. Pero mientras no. 

jueves, 27 de diciembre de 2012

Caos

Los cigarros por la noche que sientan mejor contigo. Los te quiero que han oído estas cuatro paredes. Las cervezas en tu balcón. Las veces que huelo a ti cuando te vas. La sudadera que has dejado en mi armario. Los planes de futuro. Las sábanas del suelo. Las palabras bonitas que han salido por tu boca cuando hablas de mi. Las que no son tan bonitas. Las noches de frío que resultan calientes. Los nervios del principio. Las ganas de conocernos, de aprendernos. De contarnos los lunares. Las habitaciones y el olor de tu espalda. Tu piel. Los viajes que no hemos llegado a hacer. Y puede que nunca hagamos. El sabor de tus labios. El agua de la ducha. Mis manías. Las caritas de enfado. Los abrazos de koala. Las ganas de volver a casa para verte. Los días largos sin tus labios. El olor a lana roja de tu bufanda. Las fiestas que te ponen histérico. Historias difíciles de contar. Tu sonrisa en mi pantalla. El pasado. Lo besos que no nos dimos. Los que recuperamos. Los que nos guardamos por orgullo. Los que no nos daremos. Los días enteros en la cama. Los abrazos. Lo pequeña que parezco a tu lado. Lo grande de nuestro amor. Amor dependiente. Amor complicado. Que nadie entendería. Y que nosotros cada vez entendemos menos.

martes, 25 de diciembre de 2012

Veneno

Una parte de ella lo comprendía totalmente, algo no estaba funcionando.
Trataba de buscar alguna nueva receta para sacar de su vida el sabor de la rutina: dormir, levantarse tarde, llegar muerta al mediodía, darse un baño tibio, cenar, leer un poco, dormir... y así otra vez esa misma ronda perfecta que giraba siempre en sentido único la estaba matando lentamente.

Los recuerdos, siempre tan dulces y mortales llegaban de vez en cuando con la lluvia de la madrugada, a veces la hacían sonreír, otras veces simplemente la hacían esconder la cabeza bajo las sábanas y ahogar su llanto en esa almohada que atesoraba el aroma suave de su cabello.
Estiraba un brazo hacia adelante, como buscando algo, tal vez queriendo sentir el cuerpo de ese alguien que una vez fue suyo, que una vez fue capaz de hacer de cada noche un momento de amor, fantasía y pasión que le recordaba que estaba viva, era amada y profundamente feliz. Sin embargo esa mano solo hacia contacto con el vació confirmando la soledad...

Ella lo sabia, había acabado y aunque ponía todo el esfuerzo posible por combatir esa tristeza que sabia disimular tras esa sonrisa soñadora, sus ojos cristalinos reflejaban un dolor casi real que ella no podía abandonar... ¿o ese dolor no la quería dejar a ella? Lo único que sabia era que había aprendido a convivir con él y no importaba, de todas formas solo dolía cuando la lluvia caía y le susurraba: Estás sola, él se ha ido.

La anestesia general de corazón era la rutina, eso calmaba bastante bien ese dolor durante todo el día, por la noche ya el sueño se encargaría de apagar su mente hasta que llegase el amanecer y una vez mas la rutina fuese inyectada en su vida al llegar la mañana. Era letal a largo plazo, pero era mejor que morir al instante.
Quizás en algún momento aparecería una mejor cura, algo que como una vez la había hecho tan feliz le devolviera esa sensación que el amor que se había ido fue despedazando a su paso.


sábado, 22 de diciembre de 2012

Errores

¿Qué buscas, viejo amigo?
Después de tantos años...
¿a qué vienes con sueños que albergaste
bajo cielos ajenos,
muy lejos de tu tierra?


martes, 4 de diciembre de 2012

Depende...del...día

¿Es rara, no?
La nostalgia...
Porque tener nostalgia en sí no es malo, eso es que te han pasado cosas buenas y las echas de menos.
Yo por ejemplo no tengo nostalgia de nada, porque nunca me ha pasado nada tan bueno como para poder echarlo de menos...eso sí que es una putada.
¿Se podrá tener nostalgia de algo que aún no te ha pasado?
Porque a mi a veces me pasa.
Me pasa que me imagino como van a ser las cosas, con los chicos por ejemplo, o con la vida en general...
Y luego me da pena cuando me acuerdo de lo bonitas que iban a ser, porque iban a ser PRECIOSAS.
Y luego cuando lo pienso me da nostalgia, cuando me doy cuenta de que aún no han pasado y que a lo mejor no pasan nunca...


lunes, 3 de diciembre de 2012

Se apagó la luz

Me gustaría decir tantas cosas que no me salen las palabras.
Se fue la ilusión y con ello la sonrisa de mi cara.
Se fue por no darte lo que necesitabas.
Te extraño.
Te necesito.
Me dueles.